Aprobado el plan que ayudará a mejorar la calidad del ambiente sonoro en Barakaldo

A través de una mayor concienciación, acciones sobre el tráfico o protección de los espacios tranquilos se busca mejorar la calidad acústica de la ciudad y, por ende, la salud de los vecinos
Barakaldo ya tiene su Plan de Acción para la Calidad del Ambiente Sonoro (PACAS) para el periodo 2024-2029, un paso importante que ayudará a cambiar y concienciar a los barakaldeses de la importancia de tener una calidad acústica buena, aspecto que repercute directamente en nuestra salud”. El plan se ha elaborado a partir de los resultados del Mapa del Ruido, que determina tanto la situación de contaminación acústica como los focos de ruido que hay en el municipio.
“Este Plan será nuestra guía para adoptar las estrategias y acciones que sean necesarias para corregir esta situación durante los próximos cinco años”, indica Alba Delgado, concejala del área de Desarrollo Sostenible. No obstante, “y aunque desde el Consistorio haremos frente a los diferentes retos para la lucha contra la contaminación acústica, necesitamos la colaboración de la ciudadanía, ya que la mejora en de la calidad ambiental depende también de los hábitos de todos y todas”.
Delgado sostiene que “el ruido es un factor clave, que afecta a la salud, siendo principalmente el del tráfico viario el que tiene una afección más contrastada al ser un foco emisor constante”. Asimismo, la concejala responsable del área indica que “el ruido ambiental está relacionado con una serie de factores perjudiciales para la salud como: alteraciones del sueño, enfermedades cardiovasculares y metabólicas, deterioro cognitivo así como una salud mental y un bienestar pobre”.
En Barakaldo, el Mapa del Ruido establece que el 7% de los habitantes (7.162 personas) están expuestos a más de 55 dB(A), el umbral de ruido que no se debe superar durante mucho tiempo para evitar sufrir sus perjuicios.
El PACAS incluye seis líneas estratégicas, cada una de las cuales se orienta a diferentes apartados que debe contemplar un Plan de Acción: Acciones para la mejora de la información, evaluación y seguimiento del ruido ambiental dentro del municipio; Gestión del ruido con una estructura municipal para abordar el ruido ambiental y relación con gestores de focos externos; Acciones correctivas enfocadas al tráfico; Zonas tranquilas y espacios a proteger; Gestión de focos de ruido no incluidos en el mapa del ruido; y Divulgación, concienciación y educación ambiental.
En total, estas líneas estratégicas recogen 38 acciones, que abarcan cuestiones de lo más diversas; desde un inventario de asfaltados que incluya tipo y antigüedad u otro de edificaciones con aislamiento adicional hasta la implantación de autobuses eléctricos o la evaluación y reducción del ruido provocado diferentes servicios como limpieza viaria, recogida de basuras, eventos culturales y festivos...).
También se prevé fomentar las actuaciones que mejoren acústicamente la vivienda en las ayudas municipales a la rehabilitación de edificios, realizar reuniones con gestores externos, industria o asociaciones de hostelería y comercio, o la capacitación a los técnicos para atender las quejas sobre ruido, entre otros asuntos.